Llega el verano y aunque para muchos deportistas es el momento donde más volumen y carga tienen de entrenamientos, para otros es momento de descanso. Algunos deciden hacer un parón completo del entrenamiento y esto les lleva a lo que se conoce como desentrenamiento.
Al hablar de desentrenamiento, nos referimos a la pérdida parcial o completa de las adaptaciones anatómicas, fisiológicas y de rendimiento producidas por el entrenamiento como consecuencia de la reducción o cese del entrenamiento.
Cambios en el VO2máx
Cambios en la ventilación
En cuanto a la función respiratoria, el entrenamiento provoca cambios significativos en la ventilación pulmonar durante el ejercicio de intensidad submáxima y máxima. El incremento de las necesidades de consumo de oxígeno en un deportista durante el ejercicio se traduce en una mayor producción de CO2 (VCO2), que debe eliminarse mediante un incremento de la ventilación. Las funciones respiratorias experimentan un deterioro en atletas muy entrenados, después de un período de desentrenamiento. Como han demostrado varios autores, la ventilación (VE) se afecta tras un largo período de desentrenamiento.
El rendimiento de resistencia de un atleta entrenado disminuye rápidamente como consecuencia de un estímulo de entrenamiento insuficiente que lleva al desentrenamiento, tal como lo indican los tiempos 2,6% menores, informados en un evento de natación de 366 m para nadadores de competición o el tiempo de ejercicio hasta el agotamiento 4 a 25% menor, observado en atletas entrenados en resistencia.
Rendimiento en fuerza
Los atletas entrenados en fuerza presentaron cambios leves pero no significativos en el press de banca, sentadillas, fuerza concéntrica isométrica e isocinética de extensión de rodillas y salto vertical después de 2 semanas sin entrenamiento, pero presentaron una disminución significativa de 8 a 13% en la actividad electromiográfica (EMG) del músculo vastus lateralis y de la fuerza excéntrica isocinética de extensión de rodilla. Los nadadores entrenados mantuvieron la fuerza muscular durante 4 semanas de inactividad, pero su habilidad para aplicar la fuerza en el agua se vio notablemente reducida, tal como se observa por una disminución de 13,6% en la potencia de nado.
Las ganancias de fuerza isométrica de brazos recientemente adquiridas se pierden en una tasa bastante lenta tanto el brazo ipsilateral como en el contralateral, por otro lado, se ha informado que la fuerza isocinética disminuye a una tasa mucho más alta, pero se mantiene por encima de los valores pre entrenamiento después de 4 semanas sin entrenamiento tanto en, adultos como en niños.
Otro cambio producido durante un período de desentrenamiento es la disminución del volumen mitocondrial.
Atletas muy entrenados mostraron una rápida disminución de la actividad enzimática oxidativa en las primeras 8 semanas de desentrenamiento, seguida de un nivel enzimático estabilizado sobre un 50% del valor inicial durante las últimas 4 semanas.
Cambios en el cociente respiratorio
El incremento del cociente respiratorio (CR) durante un ejercicio de intensidad submáxima y máxima es una de las consecuencias metabólicas de un período de desentrenamiento. El aumento del CR significa que existe una dependencia mayor de los hidratos de carbono como fuente de energía utilizada en el metabolismo muscular, con una disminución de la utilización de los lípidos.
Cambios en la cinética de lactato sanguíneo
La concentración de ácido láctico es una de las variables fisiológicas más sensibles tanto al entrenamiento como al desentrenamiento. La concentración de lactato en la sangre durante un ejercicio submáximo se incrementa en atletas de muy alto nivel tan sólo con 7 días de descanso. Según estudios de Coyle et al, el umbral de lactato disminuye progresivamente durante 3 meses de desentrenamiento, en atletas muy entrenados, del 79 al 74% del VO2máx.
Cambios en el glucógeno Muscular
El nivel de glucógeno muscular se ve negativamente afectado por interrupciones del entrenamiento tan cortas como de 1 semana. De hecho, se han informado reducciones de 20% en este período de tiempo en nadadores de competición, y en 4 semanas en triatletas, ciclistas y corredores. Esta reducción se debe a una disminución rápida en la conversión de glucosa a glucógeno y en la actividad de la glucógeno sintetasa.
Cambios a nivel hormonal
Desde una perspectiva hormonal, las características del desentrenamiento de corto plazo en atletas de resistencia abarcan una menor sensibilidad a la insulina y niveles no variables de catecolaminas, glucagón, cortisol y hormona de crecimiento (GH). Las hormonas anabólicas pueden aumentar en atletas de fuerza y las hormonas de regulación de fluidos-electrólitos disminuyen hasta los niveles iniciales (línea de base) después de programas de entrenamiento-desentrenamiento de corto plazo.
Aquí hemos comentado que algunas de las adaptaciones que hemos conseguido gracias al entrenamiento, las vamos a perder por el hecho de estar parados o no entrenar, o incluso por bajar demasiado la carga de entrenamientos.
Pero no todo son malas noticias: el cuerpo tiene memoria y aunque no sea tan fácil ganar esas adaptaciones de nuevo como perderlas, desde luego son mucho más fáciles de conseguir que si comienza a entrenar una persona sedentaria.
Y una cosa hay que tener clara y es que a todos nos viene bien unos días de desconexión también del entrenamiento y de las grandes palizas que nos pegamos los deportistas de resistencia.
¿Tú eres de los que deja de entrenar por completo, de los que reduce la carga de los entrenamientos, o de los que no para en ningún momento?